Muchas mujeres afirman que pasando los 30 su cuerpo empezó a presentar diferentes malestares, desde dolores de espalda hasta pérdida de cabello, ¿te ha sucedido? No te preocupes, aquí te decimos por qué puede ocurrir todo esto.
Existen diversas experiencias femeninas acerca de la particularidad edad de entre los 30 y 40 años. Si te encuentras ahí, probablemente comiences o ya hayas presentado situaciones como ciclos menstruales más cortos, bochornos insoportables, dificultades para conciliar el sueño, e incluso puede que tus emociones se encuentren en un sube y baja.
Si te has identificado con alguno de los anteriores ejemplos, déjanos decirte que no son más que signos del envejecimiento. La verdadera pregunta es ¿por qué pareciera que sucede de la noche a la mañana?
Te explicamos: antes de la menopausia; la cual generalmente sucede hasta los 52 años, ocurre una etapa conocida como perimenopausia, y aunque es totalmente natural en la vida de las mujeres, la realidad es que no se le brinda gran difusión a este periodo. Pero tranquila, aquí te contamos todo lo que debes saber.
Es un proceso confuso
Debes tener en mente que los síntomas de la perimenopausia un día pueden aparecer y al siguiente desaparecer. No existe un proceso lineal, además de que no hay pruebas totalmente confiables que confirmen si estás camino a la menopausia, sólo las que determinan que has entrado ahí. Por estos motivos, de acuerdo con la doctora Mary Jacobson, puede resultar más útil confiar en tus propios síntomas.
Comunes indicadores de la perimenopausia
Los problemas relacionados con la perimenopausia son demasiado amplios, desde uñas débiles hasta fatiga y aumento de peso; lo que genera que estas señales se le asocien a otras condiciones médicas, pasando por alto los primeros signos de la perimenopausia. De este modo, dicha etapa pareciera que sucede de la noche a la mañana, cuando no es tan así. Estos son algunos indicadores comunes por considerar:
1. Cambios de humor
2. Ansiedad intensa
3. Falta de concentración
4. Acortamiento del ciclo menstrual
No ignores los signos de la perimenopausia
Por lo general, hay muy poca información acerca de esta etapa, tanto en la discusión pública como por parte de médicos profesionales. De hecho, uno de cada cinco estudiantes de medicina recibe la suficiente capacitación acerca de las hormonas reproductivas femeninas, de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad Johns Hopkins en 2013.
En ese sentido, lo mejor que puedes hacer es informarte sobre ti misma. Cuanto más sepas acerca de tus síntomas, mejor podrás transmitir esta información a tus médicos. Se recomienda llevar un registro diario en donde anotes cada síntoma que tengas.
Recuerda, este proceso es difícil para cualquier mujer, pues se trata de aceptar el cambio de tu cuerpo, y con ello el cambio de tu identidad; sin embargo, es sumamente importante darle la relevancia que merece a la perimenopausia, con el fin de evitar ramificaciones graves como:
1. Daños en tu salud metabólica cardiovascular
2. Pérdida de masa muscular u ósea
3. Consecuencias en la salud mental (ansiedad o depresión)
Posibles tratamientos
Para comunes síntomas como la sofocación o el sudor nocturno existen tratamientos hormonales como la terapia de estrógeno sistémico, la cual puede recetarse en forma de píldoras, parche, aerosol, gel o crema; y está demostrado que ayuda a aliviar dichos malestares de la perimenopausia.
Si bien este es un proceso natural, no tienes por qué estar soportando ninguno de estos síntomas. Acude de inmediato con una profesional de la salud.
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