“Explorar lo que me hacía feliz de niña y que había olvidado”
Pintas y escribes… ¿Cuándo conectaste de lleno con tu lado creativo?
Desde niña me encanta todo lo relacionado con el arte; bailé ballet hasta los 17 años y siempre quise dedicarme a la pintura. Por azares del destino lo dejé en stand by varios años, y fue hasta el 2019 cuando publiqué mi primer libro, Lashbel, que regresé al arte. A los dos meses retomé nuevamente una de mis grandes pasiones, la pintura.
¿Qué te motivó a hacerlo?
Explorar lo que me hacía feliz de niña y que había olvidado, así como diferentes formas de expresión del ser. No podemos conformarnos solo con una; ahora estoy esculpiendo también.
¿Cuáles son tus influencias a la hora de pintar?
Mi propio ser, mi mente que es un viajezote por sí misma. Ahí encuentro material de sobra.
¿Cómo definirías tu estilo?
Arte psicodélico. Considero que ya hay muchos artistas que pintan lo que podemos ver todo el tiempo. A mí me parece interesante plasmar todo aquello que no se ve, las sombras, luces y matices de la mente humana, mis teorías y aprendizajes, mi camino.
¿Cambió en algo tu forma de trabajo con la cuarentena?
Ya llevaba un tiempo con mis horarios muy definidos y en mi espacio, así que no.
¿Qué perderá y ganará Karla Rojo de la Vega después de la cuarentena?
Nunca pierdo, estoy en constante movimiento, expansión y aprendizaje. Gané mayor autoconocimiento, fortaleza, resiliencia, disciplina, reafirmación de mis propios conocimientos y de mi ser.
¿Dónde podemos ver y conseguir tu obra?
Directamente conmigo y a través de mi cuenta: @lashbel.arte.
Top 3 Karla Rojo de la Vega
Museos indispensables en la vida:
Artistas que cambiaron tu forma de pensar:
- Picasso
- Leonora Carrington
- Frida Kahlo
Nuevos talentos que deberíamos seguir