Es verano, en una playa con un calor muy rico, comiendo en abundancia y a deshoras; y también tu descanso podría clasificarse como sedentarismo vacacional.
Toda esta relajación, así como los cambios de clima y hábitos, provocan una mayor retención de líquidos.
Factores que causan la retención e hinchazón:
- Trastornos circulatorios
- Ingesta de medicamentos
- Los nervios y el estrés
- Dietas poco equilibradas y desorganizadas
- Ritmo de vida pasivo y sedentarismo
- Exceso de sal en la alimentación y consumo abusivo de alcohol
¿Cómo saber si estás reteniendo líquidos?
- Presiona la zona de la que sospechas con el pulgar durante 30 segundos. Si al levantar el dedo la parte presionada se mantiene marcada, la respuesta es SÍ.
- También puedes notarlo si te cuesta quitarte el anillo, o si las sandalias te están dejando marcas.
Consejos para prevenir la hinchazón del verano
1. Cambia la sal por el potasio
Estamos de vacaciones y queremos comer de todo; sin embargo, las comidas y botanas que abundan en los centros turísticos son abundantes en carbohidratos, sales y azúcares. Estas sustancias contribuyen a retener líquidos, así que consume potasio, “el antídoto de la hinchazón”.
Alimentos ricos en potasio: plátano, acelgas, espinacas, papas, tomates y aguacate
2. Toma suficiente agua
Ingiere una cantidad correcta de agua incluso cuando no sientas sed. Debido al calor y el cambio de actividades, nuestro cuerpo entra en “fase de reserva” y tiende a acumular agua en los tejidos.
3. No atraigas toxinas a tu cuerpo
Lo sabemos: quieres divertirte y no hay necesidad de levantarse temprano; pero si estás de vacaciones y aumentas el consumo de tabaco y alcohol, provocarás la acumulación de toxinas e impedirás que tu organismo cumpla sus funciones de drenaje correctamente.
El apio, los espárragos, el pepino, la calabaza, la alcachofa, la piña, la sandía y el té verde son conocidos por sus capacidades diuréticas
4. Haz un poco de actividad física
La playa y tus vacaciones no son para estar todo el día tirada en un camastro. Cuando estás en movimiento tu cuerpo responde y se adapta al nuevo clima, así que puedes lidiar mejor con el calor. Así que ya lo sabes: ¡dile que sí al ejercicio y los paseos!
5. Evita las prendas ajustadas
Hiciste un montón de sacrificios para tener ese cuerpazo de verano; pero si usas ropa ceñida experimentarás una presión constante que obstruye tu circulación y hace que tu riego sanguíneo se ralentice. Si la sangre no circula correctamente, tenderás a sufrir de retención de líquidos.
Las prendas holgadas no te restan belleza, y sí te ayudarán a luchar contra la hinchazón
6. Ay, mis hormonas
La retención de líquidos afecta en mayor medida a mujeres en determinadas épocas relacionadas con desajustes hormonales, como los días previos a la menstruación, el embarazo o la menopausia.
Los consejos aquí dependen mucho de cada cuerpo; aunque parece que a casi todas nos funciona beber suficiente agua, incluir muchas frutas y verduras en las comidas y consumir un poco de chocolate.
El efecto globo es más común entre las mujeres, pero los hombres no se salvan de inflarse durante las vacaciones
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