Estos trucos de viaje para mantener su piel feliz y, al mismo tiempo, limitar los desechos y las emisiones de carbono
- Omitir el servicio de limpieza
Así, sin más: omite las toallas y la ropa de cama que traen a tu habitación todos los días. La mayoría de nosotras realmente no necesitamos sábanas y toallas limpias todos los días, y dar la vuelta al letrero de No molestar puede significar ahorrar agua y energía.
- Rellena tus propios envases vacíos
Comprar artículos diseñados para viajar cada vez que sales de vacaciones no solo es un desperdicio, sino que también se vuelve caro. Toma tus envases vacíos (o cualquier mini botella que posea) y vuelva a llenarlos con el shampoo, el gel de baño, el limpiador y los sueros que tienes en casa.
- Consulta las pautas locales de reciclaje
Investiga lo que se debe y no se debe hacer en el reciclaje del lugar al que te diriges. Antes de ir, lee sobre lo que aceptan sus contenedores para que no arrojes accidentalmente algo no reciclable (también conocido como wishcycling), infiltrándose en el flujo de desechos.
- Trae tus propios reutilizables
Los artículos desechables son convenientes mientras viajas, pero estos productos de un solo uso también son un desperdicio. Siempre que puedas, carga con alternativas reutilizables en su lugar, como almohadillas de algodón reutilizables para aplicar o eliminar el maquillaje.
- Deja los artículos de tocador sin abrir
Los productos que los hoteles ofrecen para nuestro aseo y cuidado personal probablemente no sean los mejores para tu piel y si realmente no los necesitas, es un desperdicio abrir los empaques. No dejes que el aspecto “gratuito” te tiente a generar tanta basura.