Yoga es la unión de mente, cuerpo y alma, la búsqueda del Samadhi, encontrar la felicidad. Es una práctica que conecta el cuerpo, la respiración y la mente, mediante posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación para mejorar la salud general
Por Sofía Ramírez Sainz
Maestra certificada en Dharma Yoga
Para mí, practicar yoga es lograr tener el control de mi mente y cuerpo para ser la mejor versión de mí misma, y poder vivir feliz con lo que tengo en el momento presente. El yoga es el vínculo con la realidad del cuerpo y la mente.
El poder controlar la mente significa eliminar todos los obstáculos para ser feliz. Controlar el cuerpo se consigue a través de la práctica de asanas (posturas de yoga) haciendo que el cuerpo y mente se purifiquen.
La respiración es parte esencial de esta práctica, ya que te mantiene en una meditación activa, soltando así las fluctuaciones de la mente. A continuación, te presentamos 6 tipos de posturas que puedes practicar en casa, y no te tomarán más de 30 minutos al día.
Flexiones al frente
Las flexiones hacia delante son un bálsamo para el cuerpo. Hoy en día, es muy común que mucha gente padezca rigidez en piernas y espalda, causado por el sedentarismo o ejercicios excesivos taeles como correr o hacer pesas.
Arcos
Las flexiones hacia atrás, también conocidas como arcos, abren nuestro chakra del corazón y, además, son vigorosas y fortalecedoras porque estiran los cuádriceps y flexores de la cadera.
Los arcos ayudan a abrir hombros y pecho, un área en donde muchos de nosotros mantenemos la tensión. Desarrollan fuerza en músculos de las piernas, brazos y espalda.
Si esta postura es muy avanzada para ti, puedes empezar con medio puente y obtendrás los mismos beneficios.
Posturas de equilibrio
Estas posturas mejoran la coordinación de los músculos y la postura erguida de la columna, induciendo estabilidad a nivel físico y a nivel nervioso, evitando así movimientos inconscientes. Esto hace que conservemos nuestra energía y alcancemos más fluidez y gracia.
Inversiones
Son asanas que te ponen boca abajo, es decir, tus piernas están arriba de tu corazón. Se dice que voltearte de cabeza, hará que la fuente de juventud fluya dentro de ti.
Si tu postura aun no cuenta con el equilibrio necesario, utiliza una pared para poder sostenerte. Si es muy avanzada para ti, puedes empezar haciendo perro boca abajo.
Torsiones
Estas posturas se caracterizan por el giro que recibe la columna vertebral. Es común que la espalda baja reciba mucha presión, tanto cuando estamos sentados como de pie. Descomprimirla mediante torsiones ayuda en nuestra higiene de columna recomendada por los médicos.
Con las torsiones la espalda se tonifica y los ligamentos, tendones y musculatura se alargan aportando un mayor riego sanguíneo. Así que, aunque no practiques yoga, estos movimientos son muy importantes en tu día a día; notarás como la tensión se desbloquea y los dolores disminuyen.
Descanso
Esta postura además de ser un descanso delicioso y reconfortante, tiene grandes beneficios porque calma la mente y fomenta el alivio del estrés y depresión, relaja el cuerpo, reduce el dolor de cabeza, fatiga e insomnio.
Fuentes: