En mis cuadros expreso emociones, deseos y acciones que la gente quiere, pero que casi nunca dice
¿Quién es Sablina y cuál fue tu primer acercamiento al arte?
Soy de Moscú, nací en la antigua URSS. Básicamente toda mi vida, desde los ocho años, estudié para ser pintora clásica. Aprendí los entresijos del arte académico en un entorno tradicional donde la estricta atención al detalle me convirtió en el artista que soy hoy.
Hace tres años visité Estados Unidos por primera vez. La libertad de expresión que tienen los artistas de ahí me dejó perpleja, me inspiró de una manera que nunca pude imaginar. Pasé de los encargos para los coleccionistas de élite en Rusia a mi propio estilo, a asumir riesgos que nunca hubiera esperado y fue así cómo encontré mi propio estilo individual.
"Mi arte, con su naturaleza provocativa y sus colores vibrantes, me da la oportunidad de expresar la sexualidad de forma divertida y creativa"
¿Qué te inspiró el cambio de cultura y el viaje a Estados Unidos?
Encontré el amor por accidente en la ciudad de Nueva York, sin poder hablar más que unas pocas palabras en inglés. De una manera única es lo que me inspiró a arriesgarme mi arte. Aprendí que todo es posible si estás dispuesto a trabajar por ello. Mi libertad y la fuerza del amor de mi pareja me dieron la inspiración y la energía para hacer lo que hago ahora. Ese sentimiento de que puedo pintar cualquier cosa y ser aceptada es lo que me ha permitido ofrecer este arte.
¿Consideras que la sociedad rusa es conservadora? ¿Cómo influyó todo esto en tu trabajo como artista?
Esta exposición no está completa, muchas obras de esta serie de pinturas no estaban presentes hoy.
El Ministerio de Cultura de Rusia no me dio permiso para exportar muchos de mis cuadros al extranjero, clasificó a mis obras de arte como pornografía y como es ilegal distribuir material pornográfico, estaría incurriendo en un delito… Esta es una historia tan divertida y a la vez tan triste…
¿Háblanos de tu estilo, de cómo encontraste tu voz dentro del arte?
Mis obras hablan un lenguaje universal que se llama amor. En mis cuadros expreso emociones, deseos y acciones que la gente quiere, pero que casi nunca dice. Intento tocar algo dentro de ti cuando, con sólo mirarlo, se despierta tu imaginación.
A México, a Zona Maco trajiste la exposición Aphrodisiac, ¿qué puedes decirnos sobre estas piezas?
Me gusta definir esta muestra como un afrodisíaco y libertad. Recuerda que crecí en un país muy tradicional y conservador, y llegué a la edad en que la moral de la sociedad y la regla tácita de que el papel de una mujer es ser ama de casa… Para mí ya no, y la exposición trata de la libertad de crear, de soñar y de dejar volar la imaginación.
Soy una artista. No me importan los temas políticos; me encanta que Ciudad de México me haya invitado a compartir mi obra. Estoy muy contenta de formar parte de la Semana del Arte de Zona Maco.
¿Quiénes son tus mayores influencias?
Egon Schiele me inspira con sus desnudos dinámicos y explícitos. Tamara Lempicka es la Diva Art Deco, Icon of the Jazz era y Queen of Modern, en pocas palabras, Lempicka es uno de los casos únicos en que una mujer artista logró encontrar su lugar en el sol durante su vida.
También considero genial a Salvador Dalí, su fantástico talento, imaginación y carácter impactante me resultan muy inspiradores. Otro artista que admiro es Lucian Freud, el nieto del famoso psicólogo Sigmund Freud, quien escribe un cuerpo desnudo tan corrosivo como Rembrandt.
¿Qué tendencias del mundo del arte sigues actualmente?
Siempre vuelo para ver Art Basel y la Bienal de Venecia, me encanta ver todos los cuadros con mis propios ojos, para sentirlos. A veces me pregunto con las NFT y otras tecnologías desarrollándose tan rápidamente, qué medios querrá la gente para apreciar su arte; pero lo único que sé es que el arte me inspira cada día.
¿Cuál es el mejor consejo que te han dado?
Haz siempre algo que te guste y serás feliz; y el otro es una frase que me apropié de Confucio también dijo: encuentra un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un día en tu vida. Así que convertí el arte en mi estilo de vida, no mi trabajo. Mis sueños se han hecho realidad.
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