Todos los excesos de fin de año dejan rastro en nuestro cuerpo, y en este artículo nos concentraremos en algunas recomendaciones para revertir los efectos no deseados de las celebraciones en nuestra piel y cabello.

Recupera la vitalidad de tu pelo

 

Fotografía de Erick Larregui on Unsplash

Si abusaste de los peinados tirantes, fijador, mousse y ¡hasta brillos!, es momento de darle un respiro a tu pelo y cuero cabelludo.

Limpieza: lava tu cabello con shampoo neutro para eliminar todos los restos de producto que puedan haber quedado, y si puedes encontrarlo en barra mucho mejor.

Usa acondicionador: algunas veces, el gel o fijador y la plancha dejan tan duro y seco el pelo, que es preferible empezar el lavado colocando acondicionador para que se separen las mechas y, después, seguir con el shampoo.

Cremas y ampolletas: después de la limpieza ya puedes aplicar una buena dosis de nutrición e hidratación. Procura que sean libre de siliconas y parabenos.

Puedes reemplazar las ampolletas con aceites naturales como el argán y el coco

Consiente a la piel de tu rostro

Limpieza: con las desveladas (y algunas copas) a muchas se nos olvida remover por completo el maquillaje, y este es un error muy grave. Así que, desde ahora, lava tu cara con un gel de limpieza específico para tu tipo de piel.

Para una limpieza profunda usa un cepillo facial y alguna mascarilla descongestiva o hidratante

Reparación e hidratación: para devolver la elasticidad y brillo natural de tu cara, lo mejor es elegir un buen suero reparado con vitamina C o ácido hialurónico.

Controla tu alimentación

Ya hemos dejado claro que el detox es un concepto que alimentariamente no existe: después de que nos dimos un atracón, lo mejor es la moderación como estilo de vida.

Quítale la culpa al acto de comer: incluye frutas, verduras y agua simple en cada comida

Fotografía de portada: engin akyurt on Unsplash