J.K. Capri:
Capri no sólo son yates; también hay mucha historia y bellezas naturales, y el mejor lugar para disfrutarlo todo es J.K. Place Capri Hotel. En lo que alguna vez fue el Hotel Continental, esta propiedad de J.K. se encuentra cerca de Piazza Umberto I y Vía Camerelle. La historia de este recinto comienza en 1878, cuando la Villa Bovaro se transformó en un hotel que no tardó en destacar, pues ya para 1899 era el único de primera clase con un acceso privado a la playa.
El suntuoso estilo residencial fue idea de Michele Bönan, quien respetó los elementos de la arquitectura tradicional, así como detalles en blanco y negro, para producir un efecto hogareño, seductor e íntimo.
Alojamiento: Los precios del hotel son superiores a la media; pero hay detalles que lo justifican. Por ejemplo, 20 de sus 22 habitaciones, suites y penthouses tienen vista al mar. En nuestra opinión, la opción Hideaway Superior Room es perfecta para los lunamieleros ya que se accede a ella de forma dis- creta a través de un camino externo y, además, cuenta con un patio privado.
La buena mesa: El único restaurante del hotel, JKitchen, se ha convertido en uno de los más alabados de Capri y, desde luego, merece la pena. Los platillos de este lugar son una mezcla de la alta cocina y las recetas estrictamente de temporada de la región napolitana. Después de probar las croquetas de carne Agerolese, el Pro- volone del Monaco, su Pasti dei Campi, Culatello di Zibello (una carne curada envejecida 24 meses típica de Parma) y su queso pecorino, te garantizamos que terminarás hablando italiano.
El desayuno (que está incluido) es más bien un banquete que un buffet. La comida está disponible para que uno mismo se sirva; pero puedes pedir al personal que te atienda mientras tomas el sol en el patio. Los platos calientes se hacen a solicitud, así que pídelos con tiempo. En la terraza cubierta puedes relajarte mientras disfrutas de los cócteles de casa. Los imperdibles son El Caprito, Negroni di Sera, Sunset Martini y, por supuesto, el JK Spritz.
Entretenimiento y aventura: Capri no solo es espectacular por mar, también es un paraíso para quienes aman caminar entre la naturaleza y lugares con historia como Villa Jovis, Monte Solaro, Sentiero dei Fortini y muchos más.
Lo más difícil de este destino es elegir bien las actividades, porque abundan las aventuras. Un paseo rumbo a los Farallones, la piazzetta, Anacapri, la Gruta Azul, las Marinas Grande y Piccola o los jardines Augustus, son algunos de los encantos disponibles.