¿Sabías de la importancia del ácido fólico para la salud incluso si no estás gestando?
Seguramente has escuchado hablar sobre el ácido fólico y su importancia durante el embarazo, pero ¿conoces bien qué es y para qué sirve?
Quédate a leer para conocer todo lo esencial sobre esta vitamina y su papel en tu vida diaria.
¿Qué es el ácido fólico y cuáles son sus funciones?
De entrada, no es un ácido como su nombre lo dice. Más bien, es una vitamina del grupo B hidrosoluble, es decir que se deshace en el agua, y el cuerpo la va eliminando diariamente.
Por sus beneficios para la salud, se recomienda que, así como se expulsa todos los días, también sea ingerida con la misma frecuencia.
Entre las funciones del también conocido como folato, está el hacer crecer los tejidos, sintetizar las proteínas y el ADN, ayudar a formar la hemoglobina, contribuir al buen funcionamiento del sistema nervioso, prevenir enfermedades cardiovasculares, así como el cáncer de colon y útero y tratar la anemia.
La vitamina B9 está presente en alimentos como verduras de hoja verde (lechuga, espinacas, espárragos), garbanzos, guisantes, frutas frescas, cereales y granos integrales y frutos secos
¿Cómo se consume el ácido fólico?
Además de consumirlo en los alimentos ya mencionados, también se puede ingerir en tabletas de 200 mcg diarias, ya sea para hombres o mujeres. Si eres deportista, tomas anticonceptivos orales o estás embarazada o lactando puede aumentar tu dosis. Por ejemplo, para estas últimas lo recomendable son de 350 mcg a 400 mcg.
Toma en cuenta que, aunque es bastante beneficiosa la B9, sus desventajas son que puede provocar mal sabor en la boca, náuseas, pérdida de apetito, confusión e irritabilidad y alteraciones del sueño.
¿Qué pasa si me falta ácido fólico?
En pocas palabras, puede provocar anemia megaloblástica, que es una variante de esta enfermedad, en la que los glóbulos rojos aumentan su tamaño a algo anormal. En las personas gestantes puede provocar alteraciones en el sistema nervioso del bebé.
Si quieres prevenir una falta de folato tienes que llevar una dieta equilibrada, no tomar alcohol en exceso o evitarlo en su totalidad y consumir flora intestinal.
Para que puedas identificar si estás pasando por una deshidratación de ácido fólico, por así decirlo, los síntomas más comunes son cansancio físico y mental, falta de energía, sensación de falta de respiración, mareos, irritabilidad y palidez de la piel. ¡Quédate atenta!
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