El tabaco, cremas, el esmalte de uñas… Muchas pueden ser las causas de las uñas amarillas, pero hay una solución y sin salir de casa
Las uñas amarillentas son un problema común tanto en la manicura como en la pedicura. Existen múltiples causas que pueden provocar este efecto, desde el consumo de tabaco y ciertos medicamentos hasta problemas más graves como hongos, infecciones, desequilibrios en la alimentación o enfermedades hepáticas o digestivas.
En los casos más graves, es importante consultar a un especialista para descartar cualquier problema de salud relacionado con las uñas amarillentas
Si se trata de manchas típicas del uso de esmalte, productos cosméticos o tabaco, no hay de qué preocuparse, ya que tienen una solución fácil.
Para eliminar las manchas amarillas, la primera opción es volver a pintar las uñas con esmaltes especiales. También se puede pulir la uña y utilizar productos despigmentantes o preventivos para evitar que se vuelvan a manchar.
Para prevenir que las uñas se pongan amarillas, es recomendable aplicar una base antes del esmalte
El remedio casero para terminar con las uñas amarillas
Si prefieres soluciones caseras, puedes probar con esta receta:
Paso 1. Mezcla cuatro cucharadas de agua oxigenada, vinagre o bicarbonato con dos medias tazas de agua templada.
Paso 2. Sumerge las manos en la mezcla durante dos minutos, y luego frota suavemente las uñas con un cepillo de dientes suave y limpio.
Paso 3. Repite este proceso al menos tres veces por semana para obtener resultados.
Para aumentar la efectividad, puedes combinar esta solución con una mascarilla casera de limón, aceite de oliva y bicarbonato. El limón ayuda a limpiar los restos de la uña, mientras que el bicarbonato actúa como un agente limpiador y el aceite de oliva proporciona hidratación y suavidad. En pocas semanas, podrás recuperar el tono natural de tus uñas.
Fotografía de portada: valuavitaly en Freepik.