Las personas debemos aprender de los animales porque ellos tienen la nobleza y toda la transparencia, y es algo que se va perdiendo entre las personas, esta virtud de ser verdaderos, ser auténticos”
¿Qué veremos en Mundo a caballo?
El contenido es muy variado y, como bien su nombre indica, el caballo es el hilo conductor de todas las entrevistas, que van desde la parte deportiva, que es la más conocida, pasando por aspectos de la cultura hípica, reportajes de cómo este animal ayuda al hombre a través de la equino terapia, por ejemplo, hasta viajes, recorridos y lugares desconocidos que se pueden hacer a caballo.
También tendremos a personajes destacados del Mundo a caballo y de otras profesiones como actores, cantantes y modelos que son apasionados y comparten esta gran afición por los animales.
¿Cómo nació este enorme proyecto?
Comencé con un blog de caballos y hace casi 10 años. Para mí era algo eventual porque estudié periodismo y estaba con haciendo el doctorado en Ciencias Políticas mientras trabajaba en el Parlamento Europeo. De repente surgió la oportunidad de hacer un blog de temas de caballos y, aunque no tenía nada que ver con lo que yo estaba haciendo, los caballos han sido mi gran pasión desde niña.
"Ahora llevo casi 10 años dedicándome como periodista, como profesional del del sector ecuestre y en casi todos los continentes he podido conocer y contar historias del mundo de los caballos."
¿Qué veremos para la segunda temporada?
Nuestro formato cambió muchísimo por la pandemia y se ha limitado mucho del tema de los viajes.
¿Y de todos los países que has conocido, cuál es el que más pasión tiene por los caballos?
México es uno de ellos, porque hay una enorme tradición e historia alrededor, desde la cría de caballos, como por ejemplo en la pura raza española, hasta competiciones de nivel internacional.
También es fascinante la tradición de la charrería, que es el deporte nacional aquí en México. Hay un nivel increíble de profesionalización, que además ayuda a mantener la tradición y cultura del país, así como el respeto por los animales.
¿En otro país hay un fenómeno como el de la charrería en México?
Nosotros en España que tenemos algo parecido que se llama Doma Vaquera, y es lo más parecido que he visto. Así como en España y México, hay otros países como Argentina o Estados Unidos donde llevaron las actividades del campo a las pistas, se profesionalizan y se hacen competencias.
¿Sabías que aquí en el Ejército Mexicano creó una raza, Santa Gertrudis?
Sí, y tenemos pendiente hacer un reportaje sobre, pero por todo este tema de tiempos y pandemia seguimos en diálogo con las autoridades mexicanas para poder presentar esta increíble raza y su historia.
Cambiando un poco de tema, ¿cuáles son tus razas favoritas?
Son varias porque cada una tiene un potencial y virtudes únicas. Por ahora, los lusitanos me gustan por su funcionalidad y su fuerza en pista; para la doma clásica son espectacular.
De México, me encanta la raza de caballos Azteca, que es el cruce de los españoles con los cuarto de milla, y bueno los mismos cuartos de milla para mí ha sido un descubrimiento porque allí en España no son tan habituales, y aquí en México he tenido la oportunidad de disfrutarlos y me parece una raza espectacular por sus movimientos.
¿Recuerdas cómo se llamaba tu primer caballo?
Su nombre era Furia, y no era mía exactamente, era una yegua de la casa. Salía a montar con ella y con mi padre, quien me transmitió el amor por los caballos.
Era pequeña y con Furia le perdí el miedo a estos magníficos animales; pero también aprendí a respetarlos.
Gracias a los caballos aprendí que, si tú no tienes serenidad ni fortaleza, ellos no responderán y, al mismo tiempo, ellos serán sensibles a tus miedos. He podido transmitir estas lecciones en cursos para directivos de empresas muy importantes en España, como a Maserati, donde trabajamos con los CEO para reforzar estos valores.”
Esta experiencia de los cursos me encantó porque eran varios días de trabajo y pude ver cómo los directivos, que están todo el día en oficinas en Madrid y no tratan con animales, no tratan con la naturaleza, se iban con las herramientas, la confianza y la seguridad que te valen para el día a día, para cualquier otra otro trabajo.
¿Qué otras enseñanzas te han dejado los caballos?
Las personas debemos aprender de los animales porque ellos tienen la nobleza y toda la transparencia, y es algo que se va perdiendo entre las personas, esta virtud de ser verdaderos, ser auténticos.
¿A dónde fue el último gran viaje que hiciste con caballos?
Fue antes de la pandemia y estuve justo aquí, en México; pero anteriormente viajamos a Mozambique y Sudáfrica.
¿Por ahí nos enteramos de que tuviste un encuentro con fauna salvaje en este viaje, podrías contarnos de qué se trató?
¡Sí, nos topamos con un rinoceronte y su cría! Cuando se ve el programa parece que todo está preparado, que es un decorado, pero fue un encuentro verdadero con la fauna salvaje. No sabíamos cómo reaccionar y evitamos salir a todo galope. Lo más fortuito fue que se trató de la mejor decisión porque de correr, de alterarnos, la madre nos hubiera perseguido y pudo convertirse en un evento trágico. Es un tanque, y si empieza a correr…
Después avanzamos despacio, y cuando quedamos a una distancia prudente nos retiramos a galope tendido a galope tendido hasta lo que daba, me faltaba campo para galopar.
Sí, por su puesto, es un animal salvaje que se encuentra en su territorio y está alerta por su familia.
¡Exacto, y es parte de las aventuras y los viajes! Por eso es por lo que, para mí, el animal más bello es el caballo, porque es una criatura que teniendo muchísima fuerza no ataca, al contrario, es pura nobleza.
¿Cuál será tu próximo gran viaje a caballo?
Pues creo que vuelvo a África en septiembre. Ahora estoy centrada en México y las grabaciones de aquí y España.
Antes de despedirnos, ¿cómo te describirías en 3 palabras?
Soy trabajadora, fiel a los míos y muy auténtica. Quizás no debería decirlo yo, pero creo que hay que ser auténtico en la vida, es lo que siempre me decía mi padre.
¿Tu frase de vida?
Vive y deja vivir.